La Realidad

Voy a comenzar este escrito “recontando” un antiguo cuento Sufí. Los sufíes eran conocidos por ser poseedores de ciertos conocimientos filosóficos y espirituales basados en el amor incondicional a todo y a todos. Ver “Sufismo” en Wikipedia. Acostumbraban a utilizar parábolas para enseñar y transmitir sus conocimientos. Algunos autores indican que Jesús fue educado en escuelas sufíes de la época en su adolescencia. Argumentan que a ello se debe que Jesús gustara de utilizar la parábola para comunicar sus mensajes.

He aquí el cuento…

El escenario es una comunidad en cualquier parte del mundo. Hay varias casas en esa comunidad. En una de ellas se encuentran un monje y su aprendiz trabajando en el jardín.

De pronto llega a la comunidad un desconocido. El individuo se acerca a la pareja y pregunta al monje:

“Discúlpeme señor, estoy tratando de mudarme del lugar donde vivo. Estoy visitando comunidades tratando de encontrar un lugar adecuado.”

“¿Dígame, como es esta comunidad?”

El monje le miró y le preguntó: ¿Como es la comunidad donde usted vive ahora?

“Oh la comunidad donde yo vivo ahora es un desastre. La gente no es considerada con los otros vecinos. Hay robos, escalamientos y otras situaciones indeseables. Por eso quiero mudarme de allí.” Contestó el individuo.

El monje le responde: “Pues esta comunidad es más o menos como la que usted está viviendo ahora.” El individuo agradece al monje la información y se retira.

Al poco rato aparece otro individuo y le hace la misma pregunta al monje, él también estaba buscando mudarse. El monje le repitió la misma pregunta que al individuo anterior: “¿Como es la comunidad donde usted vive ahora?”

El nuevo forastero le contestó: “Oh mi comunidad es adorable. La gente es muy amable, los vecinos se tienen mucha consideración y respeto. Se vive en paz y armonía.” indicó el individuo.

El monje le contestó: “Pues este lugar es más o menos como el lugar donde usted vive.” El individuo agradece al monje la información y se retira.”

El aprendiz de monje está sumamente confundido. No puede entender el comportamiento del monje guía y le cuestiona: “Maestro, no comprendo cómo es posible que hayas dado dos contestaciones distintas a una misma pregunta.”

El maestro le contestó calmadamente: “Si proyectas caos, eso será lo que verás a tu alrededor; si proyectas armonía y abundancia, eso es lo que percibirás donde vivas. Yo no he contestado las preguntas de manera distinta. Los lugares donde la gente habita son de la manera en que nos proyectamos en ellos. Teniendo eso en consideración, en realidad la contestación a ambas preguntas fue la misma. Nosotros creamos nuestra propia realidad.” terminó diciendo el monje.

Ahí termina nuestro cuento sufí…

Recientemente observaba un corto video de un periodista entrevistando a partidarios de Donald Trump que se prestaban a participar en uno de sus mítines políticos.

El periodista pregunta a una mujer blanca de entre 50 a 60 años: “¿Cree usted en verdad que Donald Trump ganó las elecciones pasadas?” A lo que la entrevistada contestó inmediatamente: “Oh, yo sé que él ganó, yo sé que él ganó.”

Lo que más me impactó fue la seguridad y la certeza con que lo dijo. Esta no fue una contestación politiquera, en verdad fue una contestación honesta, ella en realidad así lo cree y no parecía tener ningún motivo para dudarlo. Para ella esa es la realidad.

Obviamente su concepto de la realidad en este aspecto discrepa profundamente de la imagen de la realidad de la mayoría de los ciudadanos en Estados Unidos, gracias a Dios. Pero desgraciadamente muchos otros aceptan esto como real. Dos conceptos de la realidad distintos y opuestos solo generan desbalance, caos y sufrimientos innecesarios. Lamentablemente aún existen individuos y organizaciones que tienen como modus operandi causar caos y confusión para por la fuerza, de manera ilegal e inconstitucional hacerse del poder soberano de las naciones que optan por modelos de gobierno democráticos. Recientemente nos hemos dado cuenta de que Estados Unidos no es una excepción.

Lo que creemos es lo que moldea nuestro comportamiento como individuos. Pero lo que creemos no necesariamente es la realidad, es una imagen personal que tenemos de esa realidad, ya sea que ésta haya sido inducida por otros o por los grupos a los que nos afiliamos. Esto nos demuestra que existe una distancia entre la realidad y la imagen mental que tenemos de ella. Alguien una vez escribió: “La realidad es asíntota a la vida del humano.” Se acercará cada vez más a ella en su camino evolutivo, pero jamás la alcanza en su totalidad.

Esto nos dirige a reconocer la importancia que tiene construir nuestra imagen de la realidad utilizando herramientas como el pensamiento crítico, la evaluación y los estudios científicos y sobre todo nuestros maravillosos poderes para observar nuestros mundos (interno y externo) y cambiarnos a nosotros mismos. No hay otro ser sobre la faz de la Tierra que posea ese poder. La cita del monje en el cuento es clara: “Nosotros creamos nuestra propia realidad.” Nuestro concepto de la realidad es lo que dirige nuestras vidas. Es sumamente importante que ese concepto sea armonioso, realista y sobre todo evolutivo. Nuestra imagen de la realidad debe estar sujeta siempre a una continua y honesta revisión.

¿Como puedo describir mi realidad actual? ¿Cuáles son las características de mi comportamiento? ¿Me siento en paz o con rabia? De la manera cómo te sientas internamente así veras al mundo exterior.

A nosotros los humanos se nos hace muy difícil comprender, y más aún poner en práctica este sencillo principio. Hemos sido educados/programados para pensar que la vida nos pasa a nosotros, cuando en realidad nosotros creamos nuestro paso por la vida. Todos los componentes de la Vía Láctea se mantienen coherentemente en formación a pesar de que la galaxia gira alrededor de su centro donde (actualmente aceptado por la astronomía) se encuentra un enorme agujero negro. Todos los cuerpos celestes que la componen giran al unísono alrededor del mismo. Esto demuestra un alto nivel de coordinación y coherencia a una escala galáctica. Eso no ocurre por casualidad, hay todo un andamiaje energético que lo protege y lo mantiene coherente. El ser humano es parte de esa coordinada y armoniosa galaxia, más sin embargo la manera como han programado nuestras conciencias hace que nos comportemos como si no fuéramos parte de este balance cosmológico. Nos han hecho creer que está bien que haya guerras, tiranías y corrupción. Desgraciadamente muchos todavía aceptan que esto es lo normal. El poder del más fuerte abusando y explotando al más débil.

¿Qué cambios tenemos que hacer en nosotros para crear una realidad más coherente junto a todos los demás? Tenemos que cambiar nuestra imagen mental de la realidad. Tenemos que crear una realidad más armoniosa, inclusiva y cooperativista. El calentamiento global no lo va a resolver un solo país. Es un problema del planeta y al ser un problema del planeta nos incumbe a todos trabajar con él, no en competencia, si no en colaboración responsable.

La pregunta es para todos en general, pero las respuestas de cada uno de nosotros son personales e íntimas y pueden tocar muchos, muchos aspectos de nuestras vidas. El resultado conjunto de ese trabajo se reflejará literalmente en la comunidad donde vivas y eventualmente en todo el planeta. Las manifestaciones en nuestro entorno son el resultado directo de la idea que poseemos acerca de la realidad. Puedes pensar que tu realidad es un infierno y eso será tu experiencia en la vida. O puedes crear un paraíso, si eso es lo que proyectas en tu mente. Lo que ves que está sucediendo fuera de ti es lo que los pensamientos dentro de ti han creado. Cambia la calidad de tus pensamientos y cambiarás tu calidad de vida.

En estos momentos; ¿Cuál es tu imagen de la Realidad?